Soy
un hombre que siente los deseos de pedir perdón, de encontrarse frente al
espejo y disfrutar de haberme equivocado muchas veces en la vida, de seguir
caminos que nunca hubiera podido encontrar y de mirar al frente con los miedos
que siempre me han acompañado y por los que no he pagado dinero, pero sí muchos
dolores y lamentos, lágrimas y demás silencios que no puedo recordar.
Me
siento a los mandos de mi ego y reconozco que no me equivocado sino que he
realizado lo que sentía en cada momento, traducido puedo decir que siempre he
creído que era lo más importante del mundo y que no he encontrado en su momento
los límites que me hayan hecho discernir las situaciones que se han ido
generando en cada momento, veo que es una traducción rápida pero empiezo a ver
que todo esto es un juego, un juego donde al jugar podemos entender que seguir
normas nos hacen enlatarnos dentro de una forma, pero que realmente las normas
son los límites que nos acercan a los demás, es desde donde respetamos al otro,
a los que conviven en la sociedad que vivimos y a los debemos respeto como
ellos a nosotros,
Bonita
reflexión después de beber otro trago, pero sinceramente todo esto es jugar a
ser persona, construir una personalidad desde donde seguir nuestro juego y
conocer jugadores que nos puedan gustar y otros que no, aquellos con los que
somos felices y otros con los que somos enemigos y todo esto para avanzar o
incluso para seguir experimentando, pero realmente ¿por qué me gustan unos y
otros no? Es una pregunta que no entiendo, es algo que siento que está dentro
de mí, algo que me hace decidir y leo en muchas partes que nos enseñan los que
están en el no, aunque realmente disfrute mucho de los que están en el si.
Venga,
ahora quiero entender que todos me enseñan pero que cuando creo que me engañan
o que no me gustan es porque eso está dentro de mí, veo una chica que me gusta
y creo que soy feliz porque me gustaría conocerla, y ahora me miro y digo que
la otra que está a su lado es muy fea pero seguramente me enseñará más. Qué pregunta
me hago, realmente hablo desde mi ego y puedo escuchar lo que la vida me ha ido
guardando dentro de mí juicios y mensajes que ahora llevo en mi inconsciente, y
eso es lo que ahora quiero iluminar, no se un iluminado sino simplemente
encender ese lado oscuro para poder sentir el amor dentro de mí, no de una
rubia o morena que lleve minifalda o tenga la ropa ceñida a su cuerpo.
Diréis
que estoy loco, pero no es así, simplemente quiero sacar todo aquello que no
quiero me influya para seguir por un camino durante muchos años que me ha hecho
infeliz, que realmente ahora siento que el verdadero camino es disfrutar de
todo lo que aparece en mi vida, el sonido de un pajarillo que canta por las
mañanas dando las gracias por volver a ver la luz y por esa perrita que cuando
bajo del coche se pone a mis pies esperando una caricia, eso es vivir, eso es
sentir el amor o el cariño que el ser humano posee dentro de su corazón o de
esa sabía interior con la que ha sido diseñado o engendrado para continuar con
una especie que siento dentro de mí, con esos padres tan maravillosos que
vuelan por esos cielos de mis sueños y que nunca han muerto.
Por
esos lugares por donde ha transcurrido mi vida y por las tierras que acogerán
los restos de mi cuerpo después de que el aliento de vida siga emergiendo del
interior de la vida y llegue un momento en que todo esto se cierre para seguir
adelante en otro plano, en otra dimensión, en otro planeta o en otro paisaje
desde el que seguir escuchando el sonido de quiénes nos compartan su ilusión y
alegría, su amor y cariño, esos abrazos de una madre que todos tenemos guardado
en ese rincón del corazón que nace y sigue naciendo en cada una de estas
palabras que ahora teminan.
Un
fuerte abrazo de oso como dice mi amigo Pedro,
MIGUEL JOSÉ CARBAJOSA GÓMEZ
|