Junio del 2021
MI DESPERTAR - 30.6.2021
Una
tarde cualquiera, una playa cualquiera, un mar cualquiera, un sonido
cualquiera, todo junto para profundizar en el silencio, un silencio que huye de
la soledad, simplemente un silencio cualquiera, un dejar que los pensamientos
se paseen por la mente, que no aniden desarrollando tantas historias que siguen
aplaudiendo una manera de ser, una personalidad de oruga, un gusano que
comienza la experiencia de una metamorfosis cualquiera.
Siento
en el corazón la llegada de una energía diferente, un cambio que existe cuando
la paciencia todo lo alcanza, cuando la mirada traspasa la forma, los juicios,
las diferentes estrategias aprendidas, las numerosas equivocaciones, porque
todo ello es la experiencia de vida, es la preparación para encontrar el
siguiente paso, el momento que alguien o algo nos tiene en su tiempo, un tiempo
que no es el que creamos día a día, un tiempo cualquiera que no encuentra
minutos ni segundos.
Te
miras al espejo y encuentras en la mirada algo que no habías visto nunca, no
estás profundizando con tus ojos, simplemente estás recibiendo un algo que
realmente no sabías que existía dentro de lo que las ventanas de la vida pueden
descubrir, ese sentimiento que nos define quiénes somos, pues después de horas
incluso no descubrimos, no entendemos si te miras con más profundidad, no sabes
y ahí te quedas para comprobar qué sientes dentro, que hay detrás de la fina
piel que nos protege del exterior, de los demás e incluso de nosotros mismos.
Estás
sentado frente a la taza de café, incluso sentado en la cama, probablemente
sobre un ordenador o teléfono que deja de sonar para despertar algo que
seguramente puedes dejar volar, unos pensamientos que comienzan el principio de
muchos finales, el final de muchos principios que ya no te convencen, incluso puedes
ver sin mirar, sin entender ni tampoco enjuiciar, es el silencio de nuestro
tesoro, de lo que nos guardaron para descubrirlo sin palabras, sin saborearlo,
sin que nos rebase, es el momento principal de este nuevo amanecer ante el
espejo de nuestro rostro.
Esta
tarde en el paseo frente a las olas, en el sentir de una arena fresca y seca,
de unos pies descalzos que avanzaban sin pensar, pensando en el pasado, en el
miedo, en una angustia, en un sentir la respiración, en escuchar a cualquier
parte del cuerpo que nos lleva, en la fuerza de las piernas que nos hacen
avanzar, en observar cómo la playa está vacía, en el infinito de unas aguas que
parecen rebosan al final de ese horizonte, en unas nubes que pasean por encima
de montes y de calles, de senderos que mueren en los bosques y de chiquillos
jugando en sus castillos de infantes.
La
voz, ese sonido que nos sale de muy dentro, en ocasiones no creemos que es la
nuestra cuando la oímos grabada en un saludo, en las palabras que se juntan
después de una pequeña reunión, en los mensajes que nos llegan con el color que
en cada momento colocamos para incluirlo en la lista de tareas, en la lista de
sentimientos, en la lista cualquiera, en este instante en que puedes degustar
el té o la taza de un café que va perdiendo el calor para colorear tus labios y
una escondida lengua que paladea lo que no puedes ver a través de tu piel.
La
tarde se duerme y encuentra la vuelta a tu presente, a tu mirada después de
saludarla cada mañana al despertar y de despedirla cada noche al subir a la
almohada de los sueños. Gracias por este paseo tranquilo y por tus cinco
minutos jugando con las palabras en un paseo cualquiera.
MIGUEL JOSE CARBAJOSA GÓMEZ
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Publicado por MIGUEL JOSE el 30 de Junio, 2021, 17:24
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MI DESPERTAR - 13.6.2021
Quiero
cerrar mis ojos, escuchar las palabras que no tienen letras, esas letras que no
estudié de pequeño, esas formas que entraron en mi mente para guardarse en el
cerebro, esos momentos que no pude vivir pues el pasado ocurre a unos y a otros
de diferente manera, en hechos sorprendentes que luego se archivan y
constituyen el decálogo de la personalidad, el fondo y trastero que se guarda
en la mochila como inconsciente, como oscuridad que surge en momentos
importantes, incluso en la vida ordinaria en el comportamiento con los demás.
Vuelvo de
nuevo a encontrar la mente cargada de modos formados en la infancia, en esos
siete años que dura la primera entrada en la vida, en donde solamente hacemos
imitación de los mayores que nos rodean, de las películas que se guardan en los
archivos mentales, de aquello que nos hace repetir de por vida, pues es la
plataforma que nos hace hacernos mayores y continuar nuestro crecimiento, y de
verá siento y me creo que es lo que necesitamos para avanzar en el día a día,
que de verdad la vida es así para reconstruir ese camino que nos hace seguir
adelante.
Hay
quienes creen que nosotros los apuntamos en nuestro limbo desde donde venimos a
nacer, otros dicen que es el resultado del devenir que va surgiendo según los
sucesos nos hacen cambiar de camino, incluso de quiénes siempre miran a que
esta es la única vida que nos regalan, seguramente todo este programa es algo
mucho más sutil de lo que pensamos, pero es sencillamente seguro que lo que sea
es y no tiene una explicación durante el tiempo que pasamos circulando por la
sociedad y por todo esto que muchas veces algunos se apean antes de tiempo y
otros no quieren marchar a pesar de las continuar llamadas.
Dejo de
entrar en camino imposibles de resolver pues la realidad es vivir el momento,
el instante en que empecé a escribir este párrafo y fíjate por donde voy ahora,
es seguir tranquilamente en ese estado de paz que no llamamos muchas veces por
seguir el camino del río, por continuar con nuestros momentos sin esperar nada
de lo que nuestra mente nos va dibujando, o los pensamientos continúan juzgando
a este o al otro, Es curioso que esta mañana me surgieran motes a dos
conductores que estaban esperando un stop, dos seguidos y rápidamente dos motes
que me han despertado la sonrisa, el lento y el despistado. De verdad, me he
reído pues la mente es maravillosa y profunda para en menos de un segundo
dejarme juzgar a dos comportamientos en los ojos que estaban esperando la
llegada al cruce.
Bebo un
sorbo y sigo pensando que los pensamientos no siempre nos ayudan y esto es
parte de la profundidad del ser humano, algo que tenemos como herramienta que
nos inquieta, que nos decida, que nos impide, que nos coloca, que nos aleja y
que nos acerca, que nos duele y que nos hace querer, que los sube y nos baja,
que nos hace llorar y reír en el tiempo que tardo en que mis manos puedan
sentir el calor de las teclas, un te quiero deja en suspenso el momento de mi
sentimiento y quiero seguir expresando este aquí y ahora que se acaba de
marchar.
Son
segundos que nos hacen pensar y discurrir que dentro del cerebro hay una
química que no sabemos descubrir pero que realmente estamos en este lugar
porque algo y alguien ha colocado un enlace para seguir, para continuar, para
que después del siglo veintiuno continúa el veintidós y para que después del
cuarenta y tantos estamos dispuestos a volver y continuar construyendo o
destruyendo un proyecto que seguramente continuará para completar algo que
seguramente continuará y no dejará de continuar con nosotros o con otros que
seguramente puedan encontrar aquello que nosotros o los que antes llegaron
puedan volver a construir o destruir.
Un abrazo
chicos y chicas, o seguramente seres humanos en esta tierra. Gracias,
MIGUEL JOSÉ CARBAJOSA GÓMEZ
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Publicado por MIGUEL JOSE el 13 de Junio, 2021, 23:32
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MI DESPERTAR - 12.6.2021
Me
pongo a los mandos del coche, un volante un el pedal de freno, solos los tres
dibujamos rectas y curvas por delante de muchos otros que van quedando detrás,
espero en la nube de mi conciencia a seguir estando moviendo estos pequeños
controles de la forma más precisa para llegar a mi destino y mi mente comienza
a dibujar pensamientos, miro a través del cristal y las pequeñas gotas de la
lluvia hacen moverse al limpia que va de un lado para el otro para dejar libre
la mirada, esos puntos pequeños que aparecen y desaparecen después del barrido.
Sigo
la atención minuciosa por los espejos, nadie por la derecha y algunos que se
acercan por la izquierda, es verdad que miro los frontales de cada uno y como
la tecnología cada uno de ellos tiene una forma, pero en mi mente se
transforman en caras, algunos parecen disgustados, otros alegres y la velocidad
le da un impulso de querer adelantarme y colocarse delante, otros veo que su
velocidad parece dejarme seguir y en muchos casos me fijo solamente en la forma
en cómo se acercan.
Todo
esto es producto de un ego, digo en el viaje y me dejo ver, espero lentamente
al bajar la velocidad a ver el grueso de la carretera y descubro algo que
muchas veces vemos pero no nos dejamos ver, en una recta con subida descubro
que muchos van por el carril central de tres que consta la carretera y me
entero de que todos van pisando el acelerador, pero hay un gesto que los
delata, todos quieren ser el primero, como en una carrera y descubro que yo
también cuando no veo todo este puzzle lo hago también.
Son
egos que tienen el poder de un acelerador que les hace competir, que les inunda
de ser los primeros, que no pueden refrenar el instinto que dentro de cada uno
surge de ser el mejor, cuando muchas veces vemos un accidente, cuando sentimos
las muertes que se producen en las carreteras, cuando en un momento van riendo
al volante y al otro te encuentras como que se ha terminado tu vida o la de
otros, o cuando pasan cosas de un segundo a otro que cambian para siempre el
futuro de lo que venimos a disfrutar y se felices dentro de este cuerpo que en
cualquier momento puede dejar de funcionar y de sentir.
No
quiero ser negativo ni tremendista, simplemente lo que he sentido es el
sintentido de esta actitud que descubro
está dentro de mí, de los egos que nos sentamos al volante y que
descuidadamente apretamos el acelerador y nos dejamos llevar por la mente o
quizás por la pequeña vocecita que vive en nosotros, y no merece la pena seguir el formulario sin
escribir, simplemente es retroceder en los mensajes y pensar que todo esto es
una realidad que nos descubre el poder del ego, de las palabras que salen de
nuestros labios cuando alguien se equivoca o cuando quieren adelantarnos para
ponerse los primeros, pues es un programa social que nos hace egos absolutos de
nuestro reino.
Es
una emoción que ha pasado por mi mente y que no quería dejar pasar pues
seguramente cuando vuelva a sentarme al volante pueda incurrir en muchos
defectos que tenemos los conductores pero seguramente puede hacernos ver que tranquilamente
y dejando pasar a los demás podamos empezar a diseñar muchos más consciente la
vida, la sensación de mirarnos a la cara y dejarnos de empuñar los mensajes que
nos surgen sin escuchar que dentro de cada uno existe un diálogo que no
escuchamos y que la vida, esa felicidad que llevamos dentro de cada sonrisa,
dentro de cada abrazo, podemos encontrar en los márgenes de unos carriles
transitados por personas maravillosas que son capaces de amar y abrazar siempre
a los demás en todos los aspectos de la maravillosa existencia.
Gracias,
comparto.
MIGUEL JOSÉ CARBAJOSA GÓMEZ
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Publicado por MIGUEL JOSE el 12 de Junio, 2021, 18:11
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MI DESPERTAR - 9.6.2021
Mamá,
Papá, os quiero, de verdad que os sigo sintiendo vivos en mi corazón, en el
fondo de cada una de las células que corren y se mueren por mis venas y
arterias, por los límites de esta piel que vosotros acariciabais cuando era
chiquitín, por esos ojos que se abrían después de cada sueño viendo los rostros
que se fueron un día para subir a esas nubes en las que ahora estáis siguiendo
la vida, mi vida y las de quiénes están conmigo sintiendo el gran amor que
dentro de mi ser surge en agradeceros a los dos tanto amor que pusisteis en que
yo naciera, en que vuestro otro hijo también naciera y fuéramos hermanos, hijos
ambos de vuestro precioso amor, de vuestra preciosa existencia.
Cada
uno diferente, dos personas, un hombre identificado con su familia, una mujer
también amorosa de sus hermanos y padres, ambos dos que vivieron una guerra
civil de un país que todavía sigue teniendo sus heridas, que fueron capaces de
sobrevivir a tal barbarie y que después se amaron y criaron dos hijos que
siguieron sus enseñanzas, sus errores y sus maravillosas virtudes, una
enseñanza y dedicación que siempre para mí y seguramente para mi hermano fueron
grandiosas y excelentes.
Los
padres y madres, o las madres y los padres son humanos, seres como todos
nosotros, cómo tú, como quién cierra los ojos y cómo aquellos que sonríen o se
desalientan, de verdad, todos jugamos a ser padres, pero no como un juego, sino
como que la vida realmente nos hace serlo pues hay una especie que nos ayuda a
ser así, luego pueden venir toda una serie de cosas que nos hagan ser como cada
uno quiera, es maravilloso ser mujer y enamorarse de otra mujer, y de ser un
hombre y enamorarse de otro hombre, pues los hijos son iguales, un amor
maravilloso que nos regala la vida, que nos enciende esos ojos que se salen de
las orbitas cuando los ves crecer, cuando de diez centímetros pasan a metro y
medio o dos metros, una experiencia inolvidable,
Sus
caritas, sus formas, sus palabras, sus risas, sus enfados, ¡qué os voy a
contar! Pues yo ahora mismo escucho las palabras de mi papa, de ese hombre que
en mi vida representaba todo un Universo, de esa mamá que me miraba con unos
ojos tiernos cuando tan pequeñito estaba sentado encima de una moto, y las
miradas de todos los que alrededor disfrutaban de la escena, de esos niños y
niñas que ves cada día y que te paras pues es una instantánea que no puedes
borrar de tu momento, de esa vida que vives y calzas en cada momento.
Hoy
no es el día del padre, ni tampoco el de la madre, ni siquiera el de los
hermanos, pero todos están ahora mismo en la nube, no sé si en la misma o en
otra diferente, pero en ese lugar donde dicen que siguen mirándonos, incluso
seguramente ya están en sus lugares donde tienen que seguir haciendo o
construyendo todo este programa, pero que yo siento en todo este instante que
están alrededor, como si fuera lo único que tienen que hacer, y de veras me
gustaría saber qué es lo que hacen después.
Bueno,
gracias por estos minutos divagando sin entender ni saber, pero que necesitaba
para seguir un traguito más esperando los minutos para volver a entrar en mi
vida y continuar construyendo el camino que sigue delante de estos minutos y
que ahora mismo vuelvo a retomar para daros un instante en que poder parar en
vuestra vida y así continuar descubriendo en ese silencio una pausa más que
disfrutar.
Un
abrazo,
MIGUEL JOSÉ
CARBAJOSA GÓMEZ
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Publicado por MIGUEL JOSE el 9 de Junio, 2021, 17:04
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MI DESPERTAR - 6.6.2021
Esta noche quiero
llamar a los miedos, a los que se relacionan tanto conmigo que me acompañan a
todas partes, los llevo tan dentro que en muchas ocasiones se confunden en el
programa que va actuando lentamente para llevarme de la mano a unos
comportamientos que desde que tengo unas pausas de concentración puedo ver, son
situaciones que me hacen disgustar, que descubro lo que no me gusta de mí, esas
palabras que salen con una mirada que se centra en decir cosas que nunca
imaginaría pueden albergar la mente inconsciente.
Actúo sin darme
cuenta que es la personalidad que se ha construido en mí la que tiene la
palabra, la que no hace falta que me enoje sino que encuentra el motivo, algo
que es difícil de descubrir pero en la imagen que sale en pantalla la voy
viendo muchas veces repetida, es como si un timbre dentro se enciende y todo lo
aprendido comienza a salir disparado, la paciencia que me gusta descubrir en mi
interior deja paso a los borbotones de comportamiento que no puedo detener, es
por eso que me siento mal después de encender esa luz sobre como el
inconsciente tiene grabado cosas que ya no me sirven pero que sirven para
actuar en el día a día incontroladamente.
Es imposible
controlar las cosas, mejor cuando dejamos el control sobre todo, incluso sobre
lo que no conocemos, pero entiendo que es importante que la realidad pueda
mostrarse durante este período de consciencia abierta, como si de una pantalla
de cine se mostrara para verme lentamente en una película a cámara lenta, como
si pudiera escuchar las palabras que salen de mi garganta, la frecuencia que
voy mostrando al hablar, incluso cuando cambio de tema y puedo demostrarme que
hablo muy deprisa, tanto que no soy consciente que la otra persona que escucha
pueda relacionar rápidamente ese cambio, esa velocidad que impregno en el
sentimiento que va de un lado para el otro.
Me doy cuenta que
toda esta observación es un gran paso, que escucharme y decidir parar la
velocidad, darme unas pequeñas pausas para poder seguir hablando desde ese
corazón que se acelera sin entender la prisa, sin gustar quizás al otro por no
dejar esa pausa que pudiera poder aprovechar para preguntarme o incluso para
agradecerme, o para cualquier aportación que quiera dejarme, pero es un
infierno ver todo esto, lo cual me hace agradecer en todo momento que esté aquí
por todo lo aprendido, que pueda ver y reconocer que hay cosas en mi que no
quiero seguir llevando y que la causa es importante, pero importante es la
realidad de lo que en estos momentos siento y disfruto con todo este
aprendizaje.
En la mente están
los conflictos, nadie tiene la culpa de ellos, simplemente el conflicto que
está buscando un culpable está en mi mente, ella es la que juzga, la que busca
un culpable, la que realmente sabe que la culpa es de otro, que nosotros nos
sentimos agredidos en muchos momentos y en todo por la vida, es como si
estuviéramos compitiendo todo el rato, como si fuera el importante sobre los
demás, como si la grabación que hay dentro nos dijera que somos mejores o
peores que los demás, que nos agreden porque son y aquí dejamos nuestro juicio
y sobre todo somos mejores o inferiores porque son los otros los culpables,
Aquí no hay
culpables, aquí lo que hay solamente es dejar a una mente haber grabado todo lo
sucedido durante muchos años y es ahora cuando por alguna circunstancia
importante nos hemos dado cuenta que estamos haciendo lo que hace mucho tiempo
tuvo una impregnación importante en nuestro cerebro y la mente lo interpretó de
una manera juiciosa, como malo o como bueno sin tener en cuenta que todo esto
se va transformando dependiendo de lo vivido, de todo aquello que nos sitúa
dentro de la sociedad, dentro de todo este juego que seguimos al pie de la
letra sin tener en cuenta que lo importante, lo más maravilloso es que dentro
de nosotros, de esa mente trabajada hay un potencial inmenso de sabiduría y de
paz, de amor y sobre todo de recursos que nos hacen sentirnos felices y
encontrar la verdad en cualquier momento siempre dentro del aquí y ahora que
encontramos en cualquier instante de nuestras vidas simplemente dejando dentro
de nosotros la quietud del silencio.
Gracias, un abrazo
para todos y todas y sobre todo creeros que sois seres de paz y de amor,
MIGUEL JOSE
CARBAJOSA GÓMEZ
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Publicado por MIGUEL JOSE el 6 de Junio, 2021, 16:17
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