MI DESPERTAR - 16.4.2015
No te escucho desde la pequeña distancia que tenemos, intento comprender porqué actúo en estas condiciones, algo interno está grabado y no consigo poder encontrarlo, seguramente porque no se por donde comenzar a buscarlo, seguramente es un acto reflejo que se acostó en esta cama en la que ahora intento levantarme para dejar que los sueños se marchen en esta etapa que traspasa mi vida.
Es difícil encontrar soluciones cuando se mira desde un determinado color, por eso todo se pinta diferente, la realidad se transforma en una realidad sesgada, una realidad que tiene un sujeto que la maneja y en la que es imposible poder encontrarla sin los dibujos que intento descubrir, así es la forma en que me siento a dialogar con el silencio, la respiración me deja en la tranquilidad que me fatiga en la palabra.
Te quiero es la frase que suena dentro al comprobar como puedo encontrarme con mi maestro, esa fuerza que está en algún lugar del cuerpo, en la energía que circula sin necesidad de que se manifiesta en forma, que no tiene una manera de percibirse con los ojos ni con las manos, estos sentidos que nos ayudan a vivir en el entorno pero que realmente no sirven cuando empezamos a salir de los límites.
Hay quiénes me hablan de locura, de transformarse en un ser diferente, cuando en realidad soy un ser igual a todos, con las manos llenas de miedos y de culpas, de errores que me hacen avanzar hacia el siguiente episodio, de carreras en las que puede ver como llegar antes o después, en legados que descubro al comenzar otro tiempo que se caía de esta piel que ahora sigue despierta.
Vamos juntos en estos caminos, nos encontramos y conocemos, desconocemos como encaja el puzzle, sabemos que el desierto no es estar fuera de la mirada, que las pantallas no tienen límites que nos hagan salirnos de ellas y desaparecer, que me angustio cuando veo que doy vueltas y vueltas como una noria, así es cuando la grandeza del ser humano descubre este sentimiento que difícilmente me habría llegado escuchando palabras desconocidas.
Ya estas a mi lado y vuelves a leer los párrafos, sigues saltando de frase en frase para querer esquematizar mi forma de escribir, pero no es una forma sino una fuente de la que mana esta esencia que siempre está entre nuestra piel y nuestra conciencia, algo que cada uno puede describir según el pincel que tenga en su mano para volver a crear el cuadro, muy diferente al que la mente espera completar.
Miguel José Carbajosa Gómez
|
Publicado por Miguel José Carbajosa Gómez el 16 de Abril, 2015, 21:08
~ Comentar
~ Referencias (0)
|
